Aunque se trata de una nueva tendencia, los especialistas empiezan a advertir los problemas de la Drunkorexia, una mezcla de anorexia y alcoholismo.
En diálogo con RCN La Radio, el psiquiatra experto en niños y adolescentes Luís Ramírez explicó que esta nueva problemática se basa en que los jóvenes dejan de comer buscando reemplazar las calorías de los alimentos con las del alcohol y así no engordar.
“Aunque no sepamos el porcentaje que está incluida en este factor de riesgo nuevo, se conoce que quienes la padecen consumen poca cantidad de alimentos durante el día o no ingerirlos para reemplazarlos por las caloría que contienen los vinos, alcoholes, las sustancias que contienen este tipo de bebidas embriagantes”, dijo el especialista.
También informó que este problema responde a la preocupación por la apariencia física, propia de la edad y de nuestra sociedad, junto con el auge del alcoholismo en la juventud.
“Todos nuestros hijos están preocupados por su imagen corporal, por si están gordos, flacos, musculosos, y la preocupación extrema es por cuántas calorías están consumiendo diariamente, cuando eso ocurre tenemos que buscar ayuda profesional”, señaló Ramírez.
Asimismo agregó que esta problemática responde a un malestar de nuestra cultura y tiempo, porque se espera una imagen. De ahí la importancia de detectar como padres los cambios en los jóvenes.
“Lo que tenemos que ser es francos, genuinos, abiertos y sobre todo observadores de la conducta de nuestros hijos y hablar abiertamente con ellos, aunque es necesario que la gente sepa que hablar con los jóvenes que tienen trastornos de conducta alimentaria, ocultan la información, incluso a los terapeutas nos niegan todo”, señaló el psiquiatra.
De otro lado, advirtió que los padres no deben sentarse con los hijos a beber, ya que el alcoholismo es una de las patologías que más graves daños ha causado en todas las civilizaciones, en todos los tiempos.
“Aunque no sepamos el porcentaje que está incluida en este factor de riesgo nuevo, se conoce que quienes la padecen consumen poca cantidad de alimentos durante el día o no ingerirlos para reemplazarlos por las caloría que contienen los vinos, alcoholes, las sustancias que contienen este tipo de bebidas embriagantes”, dijo el especialista.
También informó que este problema responde a la preocupación por la apariencia física, propia de la edad y de nuestra sociedad, junto con el auge del alcoholismo en la juventud.
“Todos nuestros hijos están preocupados por su imagen corporal, por si están gordos, flacos, musculosos, y la preocupación extrema es por cuántas calorías están consumiendo diariamente, cuando eso ocurre tenemos que buscar ayuda profesional”, señaló Ramírez.
Asimismo agregó que esta problemática responde a un malestar de nuestra cultura y tiempo, porque se espera una imagen. De ahí la importancia de detectar como padres los cambios en los jóvenes.
“Lo que tenemos que ser es francos, genuinos, abiertos y sobre todo observadores de la conducta de nuestros hijos y hablar abiertamente con ellos, aunque es necesario que la gente sepa que hablar con los jóvenes que tienen trastornos de conducta alimentaria, ocultan la información, incluso a los terapeutas nos niegan todo”, señaló el psiquiatra.
De otro lado, advirtió que los padres no deben sentarse con los hijos a beber, ya que el alcoholismo es una de las patologías que más graves daños ha causado en todas las civilizaciones, en todos los tiempos.
Texto copiado de www.rcnradio.com - Conozca el original en http://www.rcn.com.co/noticias/editor/especialistas-advierten-sobre-peligros-de-la--136907#ixzz1mT9lKFNM
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