Sólo quedan tres días para que Cartago, Obando, Ansermanuevo y Tuluá se vistan de el color, la energía y la alegría que traerán consigo los cerca de tres mil jóvenes que tomarán parte de la fase final de los XVIII Juegos Deportivos Departamentales y los I Juegos Paralímpicos del Valle del Cauca.
Es por eso que, luego de varios aplazamientos, los atletas, las autoridades y los escenarios del norte de la comarca se alistan para la fiesta que dejará cientos de medallas y trofeos en manos de los mejores y que le permitirá a las nuevas generaciones prepararse para futuras competencias.
Y aunque todavía faltan muchos detalles por coordinar, los organizadores del certamen resaltan que desde ya los dueños de hoteles y hostales, así como transportadores y los propietarios de restaurantes también se pueden considerar ‘campeones’, dada la afluencia de público que llegará a las localidades sedes del certamen.
Miljail Molina Bermúdez, coordinador de Deportes de Obando, señaló que un gran beneficio para su población es el arreglo del Coliseo Álvaro Agudelo, que se está adecuando con pintura, pavimento del acceso, camerinos, duchas y unidades sanitarias.
También el arreglo del piso y el delineamiento de la cancha para fútbol de salón, baloncesto y voleibol, pese a que allí sólo habrá competencias de judo y fútbol de salón.
En Obando se espera recibir entre 300 y 400 deportistas, que se alojarán en las instituciones educativas San José y Gran Colombia, donde se están adecuando duchas y baterías sanitarias que servirán luego para el uso de los estudiantes. También serían beneficiadas con pintura para los salones.
En Ansermanuevo, entre tanto, John Guillermo Quintero, coordinador Municipal de Deportes, calificó el evento como “muy importante”, ya que también habrá mucho movimiento en lo comercial y en lo social, aunque recalcó que “se necesita más mano de Indervalle para estar tranquilos de que los Juegos sí se van a realizar”.
Allí, esperan tener inversiones en la pista de ciclomontañismo y en los locales donde se jugará billar.
A pesar de que en el casco urbano de ambas localidades la oferta hotelera no supera las 30 camas, los coordinadores locales afirmaron que los hostales rurales también están a disposición de los visitantes, pero que ya más del 50% está comprometido con directivos y miembros de la comisión de juzgamiento.
Por eso, habitantes como Leonidas García, no dudan en señalar que la llegada de los deportistas es muy buena: “Veremos movimiento por esos días, porque seguro no van a llegar solos, sino con familia y los que vienen a ver las competencias”.
En Cartago la expectativa también es alta, pese a que los escenarios ya venían en buen estado de tiempo atrás, entre ellos el Estadio Municipal y los coliseos del Café y La Isleta.
No obstante, Diego Fernando Benjumea, funcionario de la Subsecretaría del Deporte de Cartago, señaló que Indervalle viene haciendo varias adecuaciones en la pista atlética del estadio y otras en el Coliseo del Café y la cancha de tejo municipal.
A esta ciudad arribarán al menos 1.500 atletas, quienes serán alojados en los colegios Académico y Gabo, donde también se adelantan adecuaciones en la zona de duchas.
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